La transformación actual de la economía mundial es el resultado de un proceso histórico en el que algunas naciones se han integrado en bloques de comercio preferencial; lo cual ha generado importantes transformaciones en la vida económica y social de los países no industrializados. Principalmente porque la competencia entre los grandes grupos capitalistas obliga a buscar nuevos mercados, mano de obra y oportunidades para seguirse ampliando; esta competencia se ha materializado mediante la inversión en otros países - por lo regular subdesarrollados o no industrializados- con control directo, con licencias, franquicias o con la venta de sus productos; por lo que los productores locales se ven obligados a adaptarse a la competencia extranjera o a desaparecer