En los sistemas técnicos automatizados, el rol predominante del ser humano es la opción b) supervisión y mantenimiento de los sistemas automatizados.
Justificación:
1. Supervisión: Aunque los sistemas automatizados pueden realizar muchas operaciones de manera autónoma, aún requieren supervisión humana para asegurar que funcionen correctamente. Esto incluye monitorear el rendimiento, detectar y corregir errores, y realizar ajustes según sea necesario para optimizar la eficiencia y la calidad del producto.
2. Mantenimiento: Los sistemas automatizados también necesitan mantenimiento regular para garantizar su operación continua y eficiente. Esto puede incluir la limpieza, la lubricación, la reparación de partes defectuosas, y la actualización de software para adaptarse a nuevas condiciones o requerimientos del proceso.
3. Optimización y mejora continua: Aunque los sistemas automatizados están diseñados para ser eficientes, la intervención humana es crucial para identificar oportunidades de mejora, implementar cambios en el proceso y optimizar la producción. Esto implica tomar decisiones estratégicas basadas en el análisis de datos y la experiencia acumulada.
4. Adaptación a cambios: Los seres humanos son necesarios para manejar situaciones inesperadas o cambios en el entorno de producción que los sistemas automatizados podrían no ser capaces de manejar por sí mismos. La flexibilidad y capacidad de adaptación humana son clave para asegurar que los sistemas tecnológicos continúen operando de manera efectiva.
En resumen, aunque los sistemas automatizados pueden realizar tareas repetitivas y complejas de manera eficiente, la supervisión humana y el mantenimiento son esenciales para garantizar su funcionamiento óptimo, adaptabilidad y mejora continua en un entorno tecnológico en constante evolución.
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