La migración cíclica es un fenómeno migratorio donde las personas se desplazan de manera temporal y repetitiva entre dos o más lugares. Este tipo de migración suele ocurrir de forma regular, como por ejemplo temporada tras temporada, año tras año o en ciclos más largos previsibles.
Las migraciones cíclicas pueden tener diversas razones, como buscar oportunidades laborales estacionales, escapar de condiciones climáticas extremas, participar en eventos culturales o religiosos, o simplemente para mantener lazos familiares y sociales en diferentes lugares.
Un ejemplo común de migración cíclica es el trabajo estacional en la agricultura, donde los trabajadores migran para participar en la siembra, cosecha u otras actividades agrícolas durante períodos específicos del año, regresando luego a su lugar de origen.
En resumen, la migración cíclica implica movimientos repetitivos y temporales entre lugares debido a razones específicas que se repiten en ciertos momentos del año o en ciclos predecibles.
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