Respuesta:
Existe una historia real parecida, de la cual se podría decir que el cariño salvó a una persona de ser enterrada viva.
Explicación:
Todos hemos oído de la enfermedad de muerte aparente, cuyo nombre es catalepsia. En este caso se estaba celebrando el velorio cuando la hermana pidió verla por última vez. Al momento cuando abrieron el ataúd, la presunta fallecida se sentó y la saludó sonriendo. Aún estaba viva.
Al parecer fue el estímulo de su familiar lo que ayudó a que reaccionara. Esto podría ser visto como una metonimia, el llanto como el agua que riega a las flores. Es decir, hay una similitud en cuanto a que la demostración de afecto brindado, aquí el mismo que acompaña el llanto, hizo que la mujer reviviera.
