Para hacer esto basta con mantener constante la concentración de todos los REACTIVOS de la reacción a excepción de aquel para el que queremos conocer el orden de reacción. Si vemos que al hacer el doble la concentración del reactivo de estudio, la velocidad también se hace el doble, por ejemplo, podremos concluir que el orden con respecto a ese producto es uno. Si la velocidad se hiciera cuatro veces mayor, el orden sería dos. Si la velocidad fuese ocho veces mayor, sería tres...
Este proceso se repite para otro de los reactivos y así hasta acabar con todos ellos. En ese momento tendríamos el orden parcial de cada reactivo y el orden total sería la suma de todos los órdenes parciales.
